Trump firmó su peor ataque a la lucha contra el cambio climático

Alex Ruelas
Mar 29, 2017
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Con una orden ejecutiva, el presidente de EU quiere echar para atrás todas las acciones que tomó Obama contra el calentamiento global. Además, está a nada de volver a permitir los más brutales métodos de cacería en refugios de vida silvestre.

La Orden Ejecutiva de Independencia Energética

Donald Trump firmó hoy una orden ejecutiva que pretende deshacer las regulaciones impulsadas por la administración de Barack Obama en la lucha contra el cambio climático.

Rodeado de mineros sonrientes, Donald autografió la Orden de Independencia Energética, la cual quita regulaciones a la producción y quema de carbón, elimina restricciones a emisiones de efecto invernadero y alienta el uso de combustibles fósiles.

Entre otras cosas, la orden pretende eliminar el Clean Power Plan, la iniciativa estrella de Obama para reducir emisiones de la industria manufacturera. También vuelve a abrir terrenos federales a la explotación carbonífera, levanta limitaciones a la emisión de metano y corta fondos a los programas climáticos de la ONU.

Tal vez lo peor es que pone en serio riesgo el futuro del Acuerdo de París, la última chance del mundo de evitar una catástrofe climática. China había mandado un mensaje a Casa Blanca para que reconsideraran las acciones que atentan contra los esfuerzos del resto del planeta. Claramente les valió madre.

Como todo con Trump, esto no significa que su palabra es ley. Para que su firmita con manos diminutas tenga efecto, tiene que pasar un complicado proceso legal. Grupos ambientalistas y de oposición política seguramente interpondrán demandas y los secuaces de Donald tendrían que desacreditar evidencia científica clarísima. Todo el show puede tardar años.

¿Y por qué sonríen los mineros? ¿Les da gusto la destrucción? No, están celebrando que los trabajos de los que dependen sus familias ya no van a estar en riesgo.

"Con estas acciones, estamos acabando con regulaciones gubernamentales que asesinan empleos", dijo el presidente durante el acto de firma. Lo prometió durante toda su campaña; de alguna forma, está cumpliendo.

Cacería de depredadores en Alaska

Hablando de firmas, Donald está a una de permitir prácticas barbáricas de cacería en los refugios de vida silvestre de Alaska.

El senado aprobó revirar una regla promovida por la administración Obama y que entró en vigor apenas el verano pasado, la cual prohibía, entre otras cosas, cazar lobos con crías en sus madrigueras, matar osos mientras hibernan, usar cebos metálicos dentados, usar aviones para encontrar osos grizzlies y pardos para disparar y matarlos aun si están con sus cachorros.

Obvio, fueron los republicanos quienes eliminaron la restricción y ahora sólo necesitan un garabato de Trump para que se vuelva realidad, bajo pretexto de proteger especias de ungulados de las que dependen familias alaskeñas para vivir.